¡Sorpresa!

Tal vez no lo parezca pero la vida está llena de momentos que no podemos dejar pasar, que no debemos ignorar y que seguramente nos dejarán más que cualquier otro instante que conservamos en nuestra mente.

Esta vez no quiero asegurar que todo es perfecto, ni que todo sueño se hace realidad, bueno, no de la nada. La gente que ves triunfando ha dejado su alma en cada espacio, en cada momento y en cada proyecto con tal de realizarse, de lograr eso que alguien un día le dijo que no podía.

O te rindes, o lo intentas. Pobres de aquellos que se ríen de tus locuras, lo digo porque es más difícil para ellos cuando tú disfrutas de los frutos de tu esfuerzo desde la cima, desde donde todos quieren estar pero muy pocos se atreven a trabajar.

Rara vez te encuentras con alguien con la misma pasión por la vida, pero cuando esto ocurre, el camino se vuelve más ligero, lleno de risas, de retos, de historias, de canciones, de viajes y comida que te dejan con el alma sonriente, llena de esperanza, de ilusión, de amor y de muchos sentimientos positivos.

Otra cosa que ocurre cuando nos encontramos con estos seres guía, es que la visión de la vida se aclara, todo deja de ser caos para entender que es momento de arriesgarlo todo. No tiene nada de malo inspirarse de los demás, al contrario, es lo mejor que podemos hacer, regalarle al corazón un suspiro y a la razón un par de ojos nuevos para seguir su camino.

Definitivamente, no te digo que pongas en manos de alguien más tus sueños, y que no dejes que la esperanza de que algo ocurra te lleve hasta donde quieres estar. Si, el camino es muy difícil pero no imposible, al menos eso he aprendido yo.

A veces me gusta pensar que lejos de ser una "dura prueba", se trata de una lección que no hemos aprendido, de algo que no hemos logrado entender por lo que no podemos seguir nuestro camino, es difícil aprender cosas nuevas cuando no te has dado el tiempo de razonar tu presente. ¿De quién depende?

Verás, la responsabilidad de vivir, es tuya, la responsabilidad de crear y lograr, es tuya, la verdadera razón por la que estamos vivos es porque somos ideas, somos emociones y somos sueños hechos realidad. Si, es difícil llegar a la plenitud, pero tenemos toda una vida para lograrlo y cada mañana podemos intentar desde cero, ¿no crees? Obviamente si hay una persona capaz de escribir nuestra historia, de llenar de colores y letras cada día, de musicalizar nuestros sentimientos y de brincar de alegría en cada logro, en esta ocasión, si lees la primer letra mayúscula de cada uno de estos párrafos, descubrirás quién es el autor de esta historia; por cierto, ¿te das cuenta que no es tan complicado cuando dejas que las cosas fluyan, que las letras salgan, que la música suene y que los colores iluminen nuestra sonrisa? A esto me gusta llamarle una verdadera sorpresa, eso es mi día a día. La próxima vez que nos encontremos, yo seré un año más y un año menos, ¿irónico? Ya te platicaré.